Amaos unos a los otros y no desenfoqueis. El amor es quien todo lo puede y quien todo lo sabe. Si amais con pasión, no existiria arrepentimientos. Si amais todo será color de rosa, algunos te dirán que es imposible. Pero para el amor y la fe no existen imposibles.
Abrigar al desvalido. Abrazar al desconsolado y cuidar a aquel que lo amerite. Oh que bellas y hermosas formas de amar al prójimo como a uno mismo. Escindir esa llama que se apaga. Si necesita lumbre tu candelabro, reponlo y enciendelo, todos los días hay oportunidades de amar y de hacer la vida de otro brillar. No se trata de ti hermano sino de ellos, para otros se tratara de ti.
No temas cobarde, si nace el deseo de ayudar, hazlo. No titubees, ejecuta, agradece y luego sonríe. La felicidad y la satisfacción sobrará entonces porque has ayudado a otros, haz practicado la forma más pura y noble que es el amor. Amor con fe es la medicina más poderosa del planeta tierra, recetala y tómala a diario porque de ella dependen ustedes. De ella depende la salvación del ser humano.
En paz y amor traigo este mensaje para ti y para otros hermanos. No sean tímidos, compartanlo. La humanidad está sedienta de la guía espiritual. La necesitan desesperadamente. Ya no saben que hacer, van a los doctores pero no reciben cura pues el alma se cura con la oración y no con las pastillas.
Basta de hipocresías, de ir a la iglesia por cumplir con Dios y con el qué dirán. Pero te conviertes en tirano al salir. Basta de injusticias en la calle, al manejar, en la fila de la farmacia, en el trabajo. Todas estas cosas y muchas más son las que te tienen envenenada el alma. No hay médico, ni receta en pastillas para aclarar la oscuridad. Son solo el arrepentimiento sincero y la acción contra el pecado los que te sacarán de esa oscuridad y tristeza que tanto quieres ocultar a los demás.
Detengan la hipocresía, reaccionen y renazcan en la verdad crística de que el amor y la fe reviven y alimentan el alma.
-Que la paz de Dios quede con ustedes.